Los sistemas de recogida de aguas pluviales
han evolucionado a lo largo del tiempo. Hoy
en día, se dispone de sistemas con un diseño
moderno, en los que los canalones, bajantes y
accesorios se ensamblan de una forma sencilla
entre sí, ofreciendo solución constructiva a
cualquier situación que se presente.
Se trata de elementos estandarizados de acuerdo
con la norma Europea UNE-EN 612, “Canalones de
alero con frentes rígidos con reborde y bajantes
de aguas pluviales de chapa metálica” , y la norma
alemana DIN 18461. Dichas normas especifican
los requisitos para canalones y bajantes, en
condiciones normales de servicio para la recogida
y evacuación del agua de lluvia y nieve o deshielo,
a un sistema de drenaje o alcantarillado exterior
al edificio.
Los espesores más comunes de las chapas
empleadas para la fabricación de los canalones y
bajantes varían de 0,5 a 0,8 mm dependiendo del
material.
El perfil y las dimensiones de un canalón vienen
definidos por la cantidad de agua que tiene que
ser evacuada de la cubierta a las bajantes y por
los requisitos del diseño arquitectónico. Son más
altos en la parte posterior, para que en caso de
rebasar su capacidad, el agua salga por la parte
delantera y no vierta sobre la edificación.