El sistema de bocas intercambiables aporta ventajas únicas frente al resto de
collarines del mercado, siendo el único que permite salidas con diferentes medidas y
materiales, simplemente cambiando la boca del collarín. Su modularidad también
permite la optimización de los stocks, ya que con
un número mínimo de partes podemos obtener muchas combinaciones para cubrir
cualquier necesidad.